domingo, 12 de octubre de 2008

Las AVENTURAS de SOCK MONKEY

Guión y Dibujo: Tony Millionaire

Editorial: Rossell

Formato: Rústica. 87 Páginas

Precio: 9.95€

Calificación: 7/10

Cuando somos niños nos comemos el mundo para desayunar y terminamos cenándonos el universo. Somos capaces de todo, desde construir una cabaña con cuatro palos y dos trozos de tela e imaginar que somos Robin Hood y sus ladrones, hasta creer que por deslizarnos con una tabla por una pequeña cuesta somos los protagonistas de Viaje al Centro de la Tierra intentando sobrevivir a la erupción del volcán. Ningún reto es demasiado grande, ninguna aventura demasiado larga. Pero también somos capaces de las mayores crueldades, esas que sin ningún tipo de aviesa intención hacen llorar a alguno de nuestros mejores amigos para toda la vida y provoca que, momentáneamente, estos corten con nosotros. Antes de que consolas, ordenadores y demás artilugios modernos nos contaminen no queremos nada más que un par de muñecos y una habitación para nosotros, nuestra imaginación obra el resto del milagro.

Más o menos todo eso (y lo que nuestra imaginación quiera volar) es lo que Millionaire pone en juego con Sock Monkey, un tebeo atípico, inclasificable y que por más que parezca adecuado para los más pequeños de la casa, sólo un adulto será capaz de entender. Un mono hecho a partir de un calcetín y un cuervo de trapo son sus dos sufridos protagonistas. Una pareja sacada de una bizarra buddy movie que van buscándose el uno al otro para vivir las más surrealistas aventuras. ¿O cómo llamarían ustedes a intentar devolver una cabeza reducida de jíbaro a su tierra natal?. ¿O intentar emparejar a una ratona con un murciélago caza roedores?.Pues eso, surrealista, ¿no?.

El trabajo de Millionaire en su vertiente gráfica es impecable, trasluciendo la clara intención de imitar las típicas ilustraciones de libros para niños elaboradas a base de una miríada de trazos hechos con plumilla. Bajo esa inocente apariencia, y acompañado por esa crueldad que comentaba al principio, Millionaire va componiendo una obra en la que el humor negro (aunque casi me atrevería a calificarlo de cáustico) campa a sus anchas en cada una de las desventuras en las que el mono y el cuervo tienden a implicarse.

La paradoja de esta lectura, y su genialidad, es que si bien con nuestra mentalidad de adultos somos capaces de captar la fina ironía de las desgracias que rodean a los dos personajes, es necesaria la mirada de un infante para poder apreciar lo fantásticamente absurdo del relato. Sólo conjugando ambas facetas podremos disfrutar de un tebeo escrito y dibujado, qué duda cabe, por un niño grande.

Sergio Benítez (36)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me encanto el Billy Avellanas de Tony Millonaire... pero sintiendolo mucho no puedo ni ver la edicion que ha realizado Rosell de Sock Monkey.

Encuentro genial que se miren de hacer ediciones baratas de comics poco comerciales... pero creo que existe un limite.

Seguramente me lo acabare comprando... pero no sera precisamente por la edicion.

sebelo2 dijo...

Pues sin conocer la edición americana (que seguro es superior, como siempre) te diré que esta española no está nada mal: buen papel y calidad de impresión y un formato y precios asequibles.
Saludetes
Sergio